domingo, febrero 11, 2007

¿Son también reaccionarios?



Creo que, en los tiempos que corren, puedo decir que soy afortunado por no haber perdido a nadie víctima del terrorismo. Me pongo en la piel de quienes sí han sufrido esta desgracia o de aquellos que han sido, ellos mismos, alcanzados por el terror indiscriminado. Sin embargo, veo que este colectivo es tratado ahora, por algunos, como un grupo de presión que trata de “crispar” a la sociedad. Casi como una formación política alineada frente a quienes quieren que se calle. Hasta ahora sólo se culpabilizaba a partidos reales por su presunta manipulación de las víctimas. En este momento son las propias víctimas las que son tachadas de intolerantes, beligerantes y hasta crueles. Mañana… mañana puede que lleguen a tener que ocultar su condición para no verse discriminados o apartados por su delito de situarse imprudentemente cerca de donde ocurrían lamentables “accidentes".

Comprendo que son molestas. Que no se las puede esconder ni amordazar… ¿Qué olviden? ¿Qué perdonen? Es probable que algunos hayan perdonado por motivos religiosos, a fin de no sufrir otra condena más temible, la del infierno… Pero dejémonos de pamplinas y lavados de cerebro. Lo normal, lo lógico, lo natural es odiar a quienes te hicieron de forma gratuita un daño irreparable. Odiar a muerte. Lo contrario raya en lo enfermizo.

Por eso no se puede pedir a quienes fueron masacrados que aplaudan el deseo de perdón y de olvido de esas acciones por parte de otros que ni imaginan cómo sucedieron. Que – como algunos líderes religiosos – pretendan no sólo que perdonen sino que, además, olviden que quien en estos momentos está lanzando un chantaje con su huelga de hambre es un asesino múltiple orgulloso de serlo.

Amnistía Internacional lo ha tenido muy claro. Ha visto demasiada sangre y demasiada hambre forzada como para hacer el juego a quien quiere presentar la voluntaria como una tortura. El suicidio es un derecho individual. Hasta ahí ha llegado. Mi más profundo respeto a esa Institución, cuya impecable trayectoria siempre he admirado.